El cáncer de mama es el tumor más frecuente en mujeres del mundo occidental: 1 de cada 9 va a padecerlo. También puede darse en varones, pero es raro (1% del total de tumores mamarios). Por lo citado, es muy importante su prevención.
Conozcamos esta enfermedad: Si bien cualquier tejido puede desarrollar una neoplasia, en la mama se da con mayor frecuencia en los conductos (Ductales) y en su parte glandular (Lobulillares). Luego de diagnosticado y de determinar su Anatomía Patológica, hoy cobran gran importancia las características inmunohistoquímicas del tumor, de allí surgen; Tumores Luminales que presentan Receptores Hormonales, Tumores Her-2 (Factor 2 de crecimiento epidérmico) y los tumores Triple negativo, esto nos ayudará a los especialistas a su tratamiento óptimo. También se clasifican por el TNM (tamaño, ganglios, metástasis) y entre ambas clasificaciones podremos brindar un pronóstico.
¿Cómo prevenirlo? Mantén un peso saludable, evita hábitos tóxicos como beber o fumar y consulta al ginecólogo anualmente.
Prevención primaria y secundaria, hoy se realiza la primera Mamografía y Ecografía Mamaria a los 40 años y a partir de los 50 años de forma anual. En las pacientes más jóvenes con alta carga familiar de antecedentes de tumores mamarios u otros relacionados, el estudio de elección es la Resonancia Magnética Nuclear, ya que no irradia y permite obtener excelentes imágenes. El autoexamen: siempre es importante y hay que realizarlo, pero la premisa fundamental, es lograr hacer el diagnóstico sin que la enfermedad se exprese aún clínicamente como un nódulo palpable.
Para concluir, lo más importante es no temer, consultar y asesorarse con profesionales. Existen tratamientos efectivos, un amplio porcentaje de pacientes que obtienen su curación o, de no ser así, largas sobrevidas con excelente calidad de vida. Seguramente esto seguirá cada vez con mayor esperanza.
Dr. Luis Oscar Navarro – MP 1199
Jefe de Oncología – CEMNPA
Docente Investigador – UNPA